Ayer, en un comunicado oficial, Horacio Marín anunciaba con entusiasmo una baja en el precio de los combustibles: “Vengo a hacer un acuerdo con los consumidores”, empezaba la gacetilla de YPF. Luego explicaba que, parafraseando, sin subsidios la dinámica del precio local de los combustibles queda supeditada a la dinámica del precio internacional del crudo.
Un día después de que YPF aplicara un recorte del 1% en el precio de la nafta y del 2% en el gasoil en sus estaciones de servicio, el precio del crudo Brent, una de las principales referencias del mercado petrolero, subió casi un 3,46% hasta los 74 dólares por barril, después de que Irán lanzara un ataque con misiles contra Israel. Durante la jornada, el valor del crudo llegó a superar los 75 dólares, alcanzando un alza momentánea del 5%. El West Texas Intermediate (WTI), referencia en el mercado estadounidense, también experimentó un aumento similar.
La pregunta está en el aire, Horacio Marín, al frente de la red de estaciones de servicio más extendida de la Argentina, ¿tiene margen de maniobra para seguir le precio internacional del crudo?
La escalada del conflicto en Medio Oriente ocurre un día después de que YPF aplicara un recorte del 1% en el precio de la nafta y del 2% en el gasoil en sus estaciones de servicio. Esta fue la primera baja en más de cinco años, impulsada por la caída del precio del crudo a nivel internacional. Shell y Puma, dos de sus principales competidoras, adoptaron medidas similares, mientras que se esperaba que Axion se sumara a esta tendencia. Sin embargo, con el aumento de los precios internacionales, las petroleras locales podrían verse obligadas a revertir las reducciones.
Desde la industria, voceros señalaron que los costos asociados a la producción local de combustibles, junto con el ajuste del tipo de cambio y los impuestos crecientes, ya estaban ejerciendo presión sobre los precios. La volatilidad del mercado internacional ahora suma un nuevo desafío. “Con los aumentos sostenidos de impuestos y costos operativos, cualquier baja en el precio del crudo, aunque bienvenida, será difícil de sostener si los precios internacionales vuelven a subir”, comentaron desde una compañía del sector al medio Infobae.
En Argentina, el consumo de combustibles ha caído notablemente en los últimos meses debido a la recesión económica. En agosto, las ventas de nafta y gasoil registraron una caída interanual del 9,2%, con una aceleración del retroceso en comparación con julio. Las bajas fueron más marcadas en los productos premium, donde la nafta premium cayó un 19,2% y el gasoil premium un 6,2%.
Si bien la baja de precios en surtidores fue recibida como una buena noticia para los consumidores, el reciente repunte en los precios del crudo podría generar nuevas alzas en el corto plazo, dependiendo de cómo evolucione el conflicto en Medio Oriente y de las condiciones del mercado internacional.