Lo afirmó la secretaria de Minería de la Nación, Flavia Royón. Advirtió que la velocidad del desarrollo tecnológico podría reemplazar al litio como recurso para la fabricación de baterías. La prioridad es colocar en el mercado internacional el litio argentino.
“Primero hay que concentrarnos en producir más litio y consolidarnos como productor mundial del litio”, aseguró Royón en una entrevista a Bloomberg Línea. Consultada por su mirada con respecto a la industrialización del litio, la vedette argentina de los recursos naturales, Royón no descartó su importancia, pero afirmó que no debe ser excluyente. “No es que si hoy no tenemos una planta de batería el litio, no sirve”, dijo y recalcó que vincular al litio sólo con la batería es una visión “si se quiere muy de ciudad”.
La referencia inmediata es UniLib, la primera planta nacional de desarrollo de celdas de baterías de litio, el proyecto del Conicet junto con Y-TEC impulsada y difundida por su anterior gobierno.
Royón reconoció que la importancia de la industrialización del recurso fue planteado en la mesa del litio. “Es un camino que hay que recorrer. Pero primero hay que concentrarnos en producir más litio y consolidarnos como productor mundial del litio”, aseguró.
Con respecto a la ventana de oportunidad que tiene la Argentina para colocar el recurso en el mercado internacional y de cómo podría impactar la caída del precio del activo en las inversiones, Royón advirtió que la necesidad de que los proyectos locales entren rápidamente en producción. Más allá de los precios actuales, la demanda del litio va a ser sostenida por la expansión de la electromovilidad.
Pero advirtió que se trata de una ventana de oportunidad que podría cerrarse: “Son precios, como los del GNL, que están sujetos a la volatilidad. Los que están en la industria lo tienen claro. Los precios no son malos y la demanda va a seguir sostenida. Hay una ventana de oportunidad porque la curva de desarrollo tecnológico es más acelerada y puede venir un reemplazo para las baterías de litio”.
La designada por Javier Milei para conducir la cartera de Minería, la ex Ministra de Energía, también relativizó la discusión acerca de si la apuesta debe ser por el litio o por el cobre: “Acá no es litio o cobre. Es el litio, cobre, oro, plata, todo”. En este sentido, argumentó que existen proyectos de cobre de gran importancia, con niveles de inversión que alcanzan los 8 mil millones de dólares. “Van a ser un punto de inflexión en provincias como San Juan, Catamarca, Salta”.
La Argentina tiene sufientes recursos para participar como uno de los principales jugadores del mercado itnernacional, en el marco de la transición energética, pero en términos del desarrollo de la producción larga de atrás con respecto de los países vecinos, como Chile y Perú que en 2022 exportaron cobre por 50.000 millones de dólares y 19.000 millones respectivamente. Argentina, de grandes reservas de cobre, tiene varios proyectos en cartera pero aún sin producción.