El presidente de la nación, Javier Milei, anunció por decreto una reestructuración de los subsidios energéticos. Los costos reales de la energía serán trasladados a los usuarios en una transición que durará seis meses. Especialistas advierten que las demoras en la implementación, la eliminación de límites en aumentos y la indefinición del porcentaje de subsidios plantean desafíos para la viabilidad del nuevo esquema.
El decreto presidencial establece una serie de medidas para reestructurar los subsidios a la energía en el país. El texto deja saber que, con el objetivo de asegurar una transición gradual, ordenada y previsible hacia un esquema que permita trasladar los costos reales de la energía a los usuarios, se fijó un “Período de Transición hacia Subsidios Energéticos Focalizados”, que abarcará desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre de 2024. Este período podrá extenderse por única vez durante seis meses adicionales, mediante una resolución de la Secretaría de Energía.
La Secretaría de Energía podrá revisar y modificar los criterios de segmentación y exclusión de los beneficiarios del subsidio, utilizando indicadores patrimoniales que reflejen indirectamente los niveles de ingresos de los hogares. La cartera que lidera Eduardo Rodríguez Chirillo quedó facultada para establecer topes de consumo subsidiado, aplicar descuentos en las tarifas, cobrar precios mayoristas por consumos excesivos y revisar periódicamente los volúmenes de consumo máximo a subsidiar, entre otras medidas.
¿Qué dijo Juan José Carbajales sobre el decreto 465/2024?
En un hilo en X (la ex Twitter), el consultor especializado en energía, Juan José Carbajales, hizo un análisis pormenorizado del decreto. Señaló que la implementación arranca con demora, estaba prevista para mayo, y que, aunque se establecieron criterios de “gradualidad, proporcionalidad y previsibilidad” para evitar judicializaciones, se eliminó el tope que impedía aumentos superiores al 40% y 80% para diferentes niveles de usuarios.
Carbajales destaca que el decreto no especifica el porcentaje de las facturas de gas y electricidad a subsidiar y que la aplicación de zonas bioclimáticas será opcional para la Secretaría de Energía. Además, se invita a los usuarios a reempadronarse en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) y se compensará a las empresas de distribución por las pérdidas de ingresos derivadas de los descuentos y bonificaciones aplicadas a los hogares.
Carbajales concluye que, pese a una gestión ralentizada y un instrumento aún en desarrollo, se ha lanzado una herramienta para focalizar los subsidios energéticos y acercar los costos reales a los hogares durante un período de transición. La viabilidad de esta reestructuración dependerá en gran medida de la fortaleza institucional y del humor social, factores que serán clave para su éxito.
#Subsidios ¡Habemus Canasta Básica Energética (light)!
— Juan José Carbajales (@JJCarbajales) May 28, 2024
Pero… con un período de transición hasta bien pasado el invierno (30/11), durante el cual se seguirá subsidiando fuertemente a hogares N2 (bajos) y N3 (medios).https://t.co/v8d6clEdXu
(sigue) pic.twitter.com/W7Qqcb4zZp
¿Qué dice el decreto 465/2024?
El decreto presidencial 465/2024, publicado el 28 de mayo de 2024, establece una serie de medidas para reestructurar los subsidios a la energía en el país. Esta iniciativa tiene como finalidad asegurar una transición gradual, ordenada y previsible hacia un esquema que permita trasladar los costos reales de la energía a los usuarios.
Objetivos de la Reestructuración
En el primer artículo, el decreto especifica los tres objetivos principales de esta reestructuración:
- Reflejar los costos reales de la energía en las tarifas.
- Fomentar la eficiencia energética.
- Garantizar el acceso al consumo indispensable de energía para los usuarios residenciales vulnerables.
Período de Transición
Se estableció un “Período de Transición hacia Subsidios Energéticos Focalizados” desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre de 2024, con la posibilidad de una extensión única de seis meses mediante resolución de la Secretaría de Energía.
Eliminación de Límites y Revisión de Criterios
El decreto también eliminó los límites al impacto en las facturas derivados de la corrección del componente Energía basados en el Coeficiente de Variación Salarial (CVS) del año anterior. Además, se otorgó a la Secretaría de Energía la capacidad de revisar y modificar los criterios de segmentación y exclusión de los beneficiarios, utilizando indicadores patrimoniales que reflejen los niveles de ingresos de los hogares.
Acciones Durante el Período de Transición
Durante este período, la Secretaría de Energía deberá asegurar una transición gradual hacia precios de mercado y tarifas basadas en costos económicos. Las acciones específicas incluyen:
- Establecer topes de consumo subsidiado.
- Aplicar descuentos en las tarifas.
- Cobrar precios mayoristas por consumos excesivos.
- Revisar periódicamente los volúmenes de consumo máximo a subsidiar.
Normativas y Procedimientos
La Secretaría de Energía quedó facultada para dictar las normativas necesarias para la implementación del decreto, garantizando transparencia, equidad, proporcionalidad, previsibilidad y gradualidad. También se establecieron medios y procedimientos para que los usuarios puedan reempadronarse y actualizar su información de manera ágil y gratuita.
Colaboración Interinstitucional y Protección de Datos
Diversos organismos públicos deberán colaborar proporcionando la información necesaria para implementar el decreto. Toda la información recopilada será integrada al Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (SINTyS), en cumplimiento con la Ley de Protección de los Datos Personales.
Revisión de Otros Regímenes de Beneficios
La Secretaría de Energía revisará otros regímenes de beneficios y subsidios a la energía, recomendando ajustes necesarios. Se crearán mecanismos para establecer beneficios para entidades de bien público y otros usuarios sin fines de lucro.
Implementación y Vigencia
El Jefe de Gabinete de Ministros está autorizado a realizar las modificaciones presupuestarias necesarias para la implementación del decreto. El decreto entró en vigencia el día de su publicación en el Boletín Oficial.