El Ejecutivo nacional habilitó un concurso público nacional e internacional para privatizar las centrales hidroeléctricas de Alicurá, El Chocón-Arroyito, Cerros Colorados y Piedra del Águila, localizadas en las provincias de Río Negro y Neuquén.
Mediante el Decreto 895/2024, publicado en el Boletín Oficial, el Gobierno estableció que la Agencia de Transformación de Empresas Públicas gestionará la venta del paquete accionario mayoritario de las cuatro represas. El proceso contará con la coordinación de la Secretaría de Energía, ambas dependientes del Ministerio de Economía. El decreto ordenó que dentro de los próximos 180 días se abra un Concurso Público Nacional e Internacional, competitivo y expeditivo, para avanzar con la privatización.
Inicialmente, las represas iban a volver al Estado de forma transitoria en mayo de este año, como un paso previo a su privatización. Sin embargo, en agosto, el Ejecutivo decidió prorrogar las concesiones de las empresas AES, Enel, Aconcagua y Central Puerto por un año más, manteniendo el control en sus manos. Este cambio en los plazos permitió ajustar el marco normativo y establecer a la Agencia de Transformación como el ente responsable de dirigir y coordinar todo el proceso de privatización.
La concesión original de estas represas había sido otorgada durante la presidencia de Carlos Menem, en 1993, por un período de 30 años. Cuando el plazo concluyó en 2023, el gobierno anterior, bajo la dirección de Sergio Massa, dispuso sucesivas prórrogas hasta resolver su situación. Aunque el plan del peronismo, en caso de ganar las elecciones, contemplaba la estatización y gestión conjunta con las provincias, la victoria de Javier Milei en las elecciones de 2023 cambió estos planes, decantando por la privatización.
Este proceso busca otorgar al sector privado la mayoría de las acciones de las sociedades que operan las represas del Comahue, con el objetivo de garantizar la continuidad de la generación hidroeléctrica en la región y atraer inversión internacional al sector energético.