Desde enero hasta junio, los precios de las naftas y el gasoil registraron un alza promedio del 63,65%, debajo de la inflación que acumula un 71% a mayo y casi un 80% a junio, según estimaciones extraoficiales. La nafta y el gasoil aumentaron entre un 3% y un 4% ayer debido a la decisión del Gobierno de moderar el aumento del impuesto a los combustibles para no generar una mayor presión inflacionaria.
Desde ayer, 1 de julio, los surtidores reflejan una actualización de precios como consecuencia de un incremento parcial del impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), que se elevó un 1%. Este ajuste, sumado a la devaluación mensual del 2% del dólar y al reciente ajuste en el precio de los biocombustibles autorizado por la Secretaría de Energía, motivó un aumento en los precios de los combustibles.
El aumento es menor al esperado y responde a la intención del Gobierno de evitar un impacto significativo en la inflación, similar a las medidas adoptadas para las tarifas energéticas. Mes a mes, el precio de los combustibles sufre como el tipo de cambio oficial: ve demorada su anunciada recuperación.
Con este incremento, el precio de la nafta súper subió de $905 a aproximadamente $941 por litro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), mientras que el gasoil pasó de $941 a cerca de $980 por litro. La medida gubernamental de posponer una actualización mayor de los impuestos sobre los combustibles evitó un ajuste del 115% en la carga impositiva sobre la nafta y el gasoil, lo que hubiera resultado en un aumento del 18% en los surtidores, según estimaciones privadas.
Esta no es la primera vez que el Ejecutivo pospone estos ajustes impositivos. En mayo se había suspendido un ajuste que finalmente se aplicó parcialmente en junio. El cronograma de actualización de impuestos, establecido a principios de año, incluye aumentos en febrero, marzo, abril y junio, con el objetivo de ponerse al día con los aumentos postergados desde el primer trimestre de 2021.
El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, informó que la actualización del 7% pasó al 26%, lo que significó un incremento equivalente a $140 por litro en naftas, con un impacto de US$3.000 millones por año. Desde enero hasta junio, los precios de los combustibles acumulan un alza promedio del 63,65%.