Según lo indicado por el medio especialista surtidores.com, Rodríguez Chirillo informó en una reunión con empresarios petroleros posibles cambios en la información de los precios al consumidor.
Los precios finales que se informan al consumidor en las estaciones de servicio podrían cambiar; y esta vez no por la inflación. Se trata de una medida en tratativas de parte de la Secretaría de Energía de la Nación. En efecto, desde el gobierno buscan que el precio final informado en las estaciones de servicio sea el precio neto del producto, es decir sin incluir las cargas tributarias. Luego, se mostrarían por separado los conceptos impositivos.
El combustible en nuestro país no resulta una excepción a la regla. El consumidor paga una serie de impuestos cada vez que carga nafta, los cuales rondan un 63% del precio final del producto. En cada litro de combustible se le agrega: $134,34 de impuesto a los combustibles líquidos (ICL); $8,28 de impuesto al dióxido de carbono. A estos se le agrega el IVA, que alcanza a $169.12. A su vez, se agregan los conceptos cobrados a bancos, ingresos brutos, tasas, comisiones a tarjetas y Tasa Vial en las localidades que lo aplican. La legislación nacional, amparada en las resoluciones 149/98 y 2/2005, regulan el derecho de los consumidores a conocer el precio de los bienes y servicios que consumen: estos deben indicarse en pesos y de forma clara y visible.
Esta medida tiene por propósito que el consumidor se concientice acerca del peso de la carga impositiva en el precio final del bien que consume. Si bien todavía se está elaborando una propuesta final, pareciera que la idea va en línea con la del gobierno nacional: esclarecer el peso de la carga impositiva en los precios finales.