Los combustibles aumentan un 27% los precios a partir de las 00:00 de esta noche, confirmó a C5N Raúl Castellanos, el titular de la Federación de Combustibles. La súper se acerca a los 800 pesos el litro y las de grado 3 quedan en torno a los 1000 pesos el litro.
Se trata del primer aumento del 2024, el segundo desde que asumió Javier Milei la presidencia, y luego de la devaluación del 118% que llevó el tipo de cambio oficial por encima de los 800 pesos el dólar.
¿Por qué deberían seguir subiendo los combutibles?
En el largo camino hacia la paridad de exportación (export parity, como les gusta decir a los petroleros), el precio de los combustibles debería sufrir nuevos aumentos, que en marzo acumularían un 45%, según publicó Forbes.ar. El export parity vendría la paridad entre el “precio de mercado” internacional y el “precio de mercado” local. La referencia es el precio del crudo Brent, que actualmente se sitúa en 76 dólares por barril, menos descuentos y retenciones del 8%.
Esta diferencia con el valor internacional requeriría un aumento del 25% (hoy aumentó un 27%), al que hay que añadir otras variables locales que llevarían el ajuste necesario al 45%, según un estudio de la consultora Economía & Energía.
En primer lugar, si se sigue la trayectoria del tipo de cambio anunciada por el ministro Luis Caputo (crawling peg del 2% mensual) y se mantiene la fórmula para que los exportadores coticen el 20% de sus ventas al contado con liquidación, la gasolina tendría que aumentar un 8% para mantener su valor.
El segundo elemento que implica un traspaso de costos es el último aumento autorizado del bioetanol y biodiesel, que impactará en un 2% en el precio final en la bomba debido al porcentaje de mezcla con gasolina y gasoil del 12% y 7,5%, respectivamente.
Otro factor crucial será la actualización de los impuestos a los combustibles líquidos, que han estado congelados durante casi tres años como mecanismo de anclaje antiinflacionario.
Para recuperar todo el retraso acumulado en estos años, el ICL tendría que dar un salto del 377%, lo que repercutiría en un 9% en el precio final de los combustibles. Es importante señalar que, debido al congelamiento realizado por el Gobierno anterior, el Estado dejó de recaudar más de 4.500 millones de dólares en este período.
Fuentes del gobierno dejaron saber off the record a Forbes.ar que el camino hacia la paridad de exportación podría tardar entre 3 y 6 meses, para luego intentar avanzar hacia una “paridad de importación”.
Resulta que alrededor del 20% del combustible consumido localmente es importado y, por lo tanto, el oficialismo considera que el precio natural de una economía de mercado deficitaria en el segmento downstream es el precio marginal. En otras palabras, todos los combustibles deberían venderse al precio del más caro.
La situación es diferente en el mercado del petróleo crudo, donde Argentina tiene un excedente de producción. Por lo tanto, el precio de mercado para este segmento es la paridad de exportación descrita anteriormente, para que a un productor le resulte indiferente vender a una refinería nacional o a un cliente extranjero.
Fuente: C5N y Forbes.ar